Una de las características que ha acompañado a la humanidad desde los inicios de los tiempos es la capacidad y la voluntad de evolucionar constantemente y mejorar las herramientas con las que superar los obstáculos que se van presentando, intentando dar siempre un paso adelante para ir dejando atrás barreras.
La evolución de la tecnología ha llevado al descubrimiento y creación de todo tipo de materiales nuevos, que tienen un montón de aplicaciones diferentes, como podemos ver en todo tipo de recipientes y artículos de uso frecuente.
En el caso de las botellas, por ejemplo, durante los últimos años han proliferado las botellas de plástico, de todas las formas y colores posibles, que se venden incluso en máquinas de vending y que, por desgracia, han supuesto también un aumento en la contaminación por el uso de estos derivados del petróleo.
Sin embargo, hay mucha gente que sigue prefiriendo guardar el agua y otras bebidas en las siempre fiables botellas de vidrio,
que durante muchos años fueron el principal recipiente de líquidos y bebidas, y que parece que en los últimos años han vuelto a ganar fuerza entre los consumidores debido a sus claras ventajas respecto a otros materiales de nueva creación.
Y es que como dice el dicho, si algo funciona es mejor no tocarlo, y las botellas de vidrio han demostrado, a lo largo de toda su historia, ser un excelente recipiente de todo tipo de bebidas y líquidos, utilizado desde tiempos inmemoriales, básicamente desde su creación.
Las botellas de vidrio siguen siendo la mejor opción para recipientes de bebidas
Esto es gracias a las características propias del material en sí. Por ejemplo, y aunque parezca una obviedad, la transparencia del vidrio hace que sea mucho más identificable su contenido, así como la fiabilidad de la calidad del mismo, uno de los motivos por lo que sustituyó rápidamente a los recipientes de cerámica en tiempos pasados.
Las botellas de vidrio hoy en día tienen también una importancia en el poco impacto que genera en el medio ambiente, puesto que es un material 100% reciclable y que requiere unos recursos naturales para su creación prácticamente infinitos, a diferencia de su competencia industrial como es el plástico.
Otra calidad de las botellas de vidrio es su capacidad de aislamiento térmico, conservando mucho mejor la frescura que el plástico, además de ser un material que no deja ningún tipo de rastro en cuanto a gusto en la bebida guarda dentro, a diferencia de lo que ocurre con otros materiales como las latas de aluminio o las botellas de plástico, que suelen dejar un regusto que no es nada agradable a la hora de beber.